Amados Pares, Seres de Luz del Cono Sur y Gran Familia de la Luz.
Nos hemos re - unido en el punto del cruce de las lineas axiatonales que marcan la unión de la Cruz del Sur. Allí, en las Cuevas de Ongamira, desfilamos desde tempranas horas en caravana, serpentenado el sendero alumbrado por las luces de Erks, la noche tocaba a su fin
y alli nuestro grupo adelantándose en el lugar, se centralizó en dibujar y calcular las medidas de la GRAN ESTRELLA DE DAVIID que debíamos manifestar en la Tierra para ubicarnos con nuestros Templos Fisicos.
Honrando a nuestra Amada Madre Gaia, direccionados por nuestra Reina Dévica, La Virgen de Guadalupe, trazamos las líneas y sellamos con el elixir mágico que detona fuertemente como la herramienta alquimica más poderosa en luz y amor,   el Sagrado Incienso; Mirra y Almizcle en unión con el Agua Diamantina, selló la fuerza áurica en plano fisico de la Gran Estrella para unificar a los Hijos de la Luz que se dieron cita en el lugar para hacer el Anclaje Lumínico de la Fuerza equinoccial y manifestar las Llaves del Cambio, para este Nuevo Tiempo. |
La gran fuerza de la Orden de Melquizedec, el Ojo Avizor, la Cruz del Nuevo Tiempo, Orlada y en contención la gran Llave Maestra del Ank, en un solo símbolo, a través del Sagrado Libro que bendecirá la Tierra en los confines, llegando a cada ser disponible en ejercicio de sus Dones Celestiales activos a través de la apertura de la glándula pineal.
La noche dio paso al Rayo Equinoccial y las aves cantaron y en círculo se manifestaron, las voces andinas dieron paso a la activación del vórtice de la Ciudad de Luz que debia ser aperturada en conexión con las ya expuestas anteriormente. El mantra resonó en el Cosmos y el
ATALAY, ATALAY ATALAY,
abrió el Supremo Vórtice.
Los corazones unificados en Luz, dieron paso a la algarabía, el amor inundó el planeta.
Equilibramos las fuerzas femeninas y masculinas, en el centro de la Gran Estrella como pareja cósmica y comprometida al Bien Supremo, mi esposo y yo, sostuvimos la Gran Luz Divina, en nuestros corazones se manifestó el Orden Divino y con el anillo atlante unificamos nuestras fuerzas de Amor y Luz por el sagrado bienestar de nuestro amado Planeta Azul y por todos los que lo habitamos.
Equilibramos las fuerzas femeninas y masculinas, en el centro de la Gran Estrella como pareja cósmica y comprometida al Bien Supremo, mi esposo y yo, sostuvimos la Gran Luz Divina, en nuestros corazones se manifestó el Orden Divino y con el anillo atlante unificamos nuestras fuerzas de Amor y Luz por el sagrado bienestar de nuestro amado Planeta Azul y por todos los que lo habitamos.
En solemne rito de amor las parejas unificadas en los vértices de los triángulos simbolizando en prototipo la Unión de las Razas Cósmicas en amor y siendo lo femenino y masculino Uno en el Todo.
Se dió paso a la alegria, y el Nuevo Amanecer se hizo presente, la luz del sol alumbró bañandonos en oro cuántico, sentimos la presencia de la Confederacion Galáctica, Miguel y su Corte, acompañando al Maestro Jesus. Angeles,Maestros y Guias Ancestrales nos hicieron ajustes moleculares y nos prepararon para una nueva fase ascensional... el sonar de tambores, cuencos y violín cerraron el Gran Evento.
El retorno, se hizo con las luces del Nuevo Dia, serpenteando el camino de retorno a la Ciudad de Capilla del Monte. Allí nuestros peregrinos, mas de doscientas personas, se preparaban para retornar a sus lugares.
Desde toda la Argentina, nuestros hermanos Chilenos, de Brasil, Ecuador y Bolivia, juntos en una sola frecuencia. AMOR.
Gracias a toda la Milicia de Miguel en la Tierra, gracias amerindios, amados Seres, la Luz sea en cada uno y en la Tierra se multiplique el Amor, la Sanación y la Luz.
An ansha..
Anita...Soy Sei - Lein
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